Incluye un gran balneario ubicado a 1.800 metros sobre el nivel del mar, en los Alpes orientales italianos, a la altura de los macizos Dolomitas, declarados Patrimonio Natural de la Humanidad por la UNESCO.
POR V2COM / FOTOS FORESTIS
El manejo cuidadoso del paisaje fue la premisa para la construcción de tres torres arbóreas, permitiendo así que el entorno tomara la iniciativa a través de un lenguaje arquitectónico limpio y lineal. Con el mismo respeto, los pasillos de conexión y áreas como el restaurante y el spa se llevaron al metro.
Continuando con la idea del lugar de curación original, es decir, el edificio centenario principal de Forestis, todas las habitaciones dan al sol.
Cuatro elementos causales: agua de manantial, aire, sol y clima, están representados por el diseño interior y la arquitectura, mediante el uso de cuatro materiales naturales.
En toda la construcción, la piedra es un elemento fundamental con un revestimiento superficial mineral que permite la entrada de la dolomita en el edificio.
El vidrio, por su parte, representa una buena calidad del aire a través de su transparencia.
Los huéspedes se sumergen en medio del bosque, a la altura de los ojos de los monumentales Dolomitas, declarados el 26 de junio del 2009 como Patrimonio Natural de la Humanidad por la UNESCO.
El sol fortalece y calienta, inspirando el uso de tejidos cálidos naturales que irradian confort.
Las paredes y los techos de las suites están hechos de abeto sin tratar. En el edificio catalogado, que recuerda a una gran casa señorial, no se permitía cambiar elementos como sus artesonados y ventanas. La madera de la fachada también permanece inalterada y refleja la historia del edificio.
ASAGGIO
Fundado en 2012 por Gian Marco Giovanoli y Armin Sader, quienes se conocieron durante sus estudios conjuntos en Innsbruck y Florencia. Asaggio es un acrónimo de sus dos nombres, y una expresión literal de la filosofía del estudio de arquitectura, encarnada en un concepto estético-arquitectónico tan contemporáneo como audaz.
En el transcurso de la realización de numerosos proyectos juntos, la inspiración mutua se convirtió en un camino común, Asaggio, un punto de inflexión hacia una forma completamente nueva de pensar sobre la arquitectura que se enfoca en el individuo como el centro de cada proyecto.
Forestis es un lugar de retiro rodeado de naturaleza, donde el tiempo vuelve a cobrar sentido y se llena de valor emocional a través de la atención física y mental hacia cada uno de sus huéspedes.
El ático de Forestis está rodeado de densas copas de árboles. Nada obstruye la vista hacia el valle, sobre los paisajes montañosos boscosos que circundan esta espléndida construcción.
El spa se inspira en los elementos naturales y en la sabiduría de los celtas, que desarrollaron sus vastos conocimientos de curación aquí mismo, en los bosques y las montañas de los Alpes.
